Aprender a identificar ramas de coníferas y árboles coníferos
Los árboles coníferos son una fuente de alimento importante para los conejos. Especialmente en invierno se debe ofrecer una buena cantidad, ya que los aceites esenciales que contienen mantienen a los conejos sanos y ayudan a prevenir enfermedades respiratorias y trastornos digestivos.
Las ramas de coníferas se roen según necesidad y en pequeñas cantidades. Por eso también son muy adecuadas como decoración verde en el espacio de los conejos.
Hay seis tipos principales de coníferas:
- Abetos rojos / Píceas (Picea, adecuadas)
- Abetos (Abies, adecuadas para la alimentación)
- Pseudotsugas / Abetos de Douglas (Pseudotsuga, adecuados)
- Pinos (Pinus, pueden comerlo)
- Cedros (Cedrus, adecuados)
- Alerces (Larix, pueden comerlo)
- Tejos (Taxus, altamente tóxicos)

También deben mencionarse las siguientes especies vegetales:
- Tuya (Thuja)
- Ciprés (Cupressus)
- Enebro (Juniperus)
- Falso ciprés (Chamaecyparis)
A ojos inexpertos se parecen mucho a las coníferas, aunque botánicamente no todas lo son. En cantidades muy pequeñas y dentro de una dieta variada no representan un riesgo (no ofrecer como alimento exclusivo ni sin alternativas). Se diferencian claramente de otros árboles coníferos por la forma de sus hojas: no tienen verdaderas “agujas”.
Para la alimentación no es necesario identificar la especie exacta del árbol, sino simplemente clasificarlo correctamente por tipo — o asegurarse de que no se trata de un tejo (Taxus), ya que este es tóxico.
Píceas
Las píceas son los árboles coníferos más comunes en Alemania. Los bosques típicos en los que todos los árboles se parecen suelen ser pinares de píceas, especialmente con pícea común o pícea roja (Picea abies).
Pícea roja, pícea común (Picea abies)


Pícea de nido

Pícea erizo azul


Pícea azul

Pícea punzante


Pícea nido

Pícea serbia


Pícea colgante

Pícea blanca

Pícea azúcar


Las píceas pueden tener aspectos muy diferentes, pero aun así comparten características comunes.